Tras tres años de andadura empresaria, Playgiga lleva camino de convertirse en un proyecto verdaderamente revolucionario. Según César Valencia, segundo al mando de la compañía, acaban de firmar contratos con tres operadoras de telecomunicaciones "muy grandes y muy respetables", una de ellas española. Los nombres no han trascendido por cuestiones de confidencialidad.
Para quien no los conozca, Playgiga es una start-up española que ofrecerá la posibilidad de jugar mediante streaming, de forma similar a como Netflix permite ver series. Esto implicaría que no necesitamos comprar los videojuegos para disfrutarlos, sino que simplemente pagando una cuota mensual tenemos acceso a todos los videojuegos que queramos. Además, el streaming elimina las limitaciones de hardware, puesto que los juegos se están ejecutando en un servidor remoto, y permitirá a los usuarios con equipos modestos, o incluso que sólo tengan una televisión y un mando, disfrutar de juegos de última generación.
Hay algunas limitaciones, por supuesto. A pesar de que, según César Valencia, tienen el mejor algoritmo de compresión del mundo, los frames por segundo estarán en un principio limitados a 30 (lo cual, a pesar del la reciente fiebre de los 60 fps, siempre ha sido más que suficiente). También necesitaremos, por razones obvias, una conexión a internet con un buen ancho de banda, y ahí es donde entran sus recientes tratos con las operadoras de telecomunicaciones.
Playgiga estará en explotación el segundo trimestre de 2015, y la suscripción tendrá un precio que oscilará entre los 8 y los 15 euros. El catálogo de juegos al que podremos acceder por ese dinero ronda los 1.500 títulos, una cantidad nada desdeñable. En estos momentos, la inversión en Playgiga asciende a tres millones de euros, y precisamente ahora se está cerrando otra ronda de financiación. De modo que los que quieran apuntarse (económicamente) al proyecto, aún están a tiempo.