El Samsung Galaxy Alpha se convierte en el modelo de diseño más cuidado de toda la gama de dispositivos Samsung Galaxy gracias a su acabado metálico y materiales de calidad. El tamaño del equipo también es un punto a destacar ya que con los apenas 6.7 milímetros es el Samsung Galaxy más delgado jamás creado por el fabricante. Aún así, la carcasa compacta esconde en su interior un listado de características y especificaciones de primer nivel, arsenal con el que la firma pretende convertir el modelo en un verdadero iPhone Killer.
El diseño del Samsung Galaxy Alpha es uno de los puntales del terminal. El fabricante ha querido elaborar un smartphone de calidad, que destaque no solo por un diseño que rompa con todo lo visto en los Samsung Galaxy, sino que además utilice materiales “premium”. Aunque la carcasa no ha sido fabricada íntegramente en metal, sí dispone de un remate de aluminio alrededor de todo el perfil de la carcasa que además de visual es un componente que ofrece rigidez al conjunto.
En cuanto a la tapa trasera, la firma vuelve a apostar por el plástico, aunque con el tacto que ya pudimos ver en el Samsung Galaxy S5. No obstante, el acabado punteado es mucho más fino. Estos detalles de terminación, el fino grosor de 6.7 milímetros y los apenas 115 gramos de peso hacen del smartphone un equipo compacto, ligero y ergonómico.
En el apartado de prestaciones, el Samsung Galaxy Alpha brilla con luz propia. Samsung ha optado por un display Super AMOLED HD de 4.7 pulgadas con una resolución de 1.280 x 720 píxeles. En el apartado multimedia encontramos una cámara con sensor de 12 megapíxeles capaz de grabar vídeo en calidad 4K, o lo que es lo mismo, 3840 x 2160 píxeles. En el frontal encontramos igualmente una cámara para videollamadas y selfies de 2.1 megapíxeles.
El verdadero potencial del modelo lo encontramos en el hardware más técnico. El Samsung Galaxy Alpha saldrá a la venta en dos versiones. La versión internacional contará con el mismo procesador que el Samsung Galaxy S5, un chip Qualcomm Snapdragon 801 a 2.5 GHz y GPU Adreno 330. La otra versión incorporará un SoC de marca propia, un Samsung Exynos 5 Octa con arquitectura AMR Big.LITTLE.
Dentro del apartado de la memoria, el equipo dispondrá de 32 GB internos. En esta ocasión no existe slot para tarjetas de memoria externas. En lo que a la memoria RAM se refiere, el sistema operativo -Android 4.4.4 KitKat, tendrá a su disposición 2 GB.
Otro de los puntos destacados del Galaxy Alpha es la conectividad. El fabricante ha incluido un módem LTE de categoría 6 que catapulta la velocidad de descarga hasta los 300 Mbps. La conexión WiFi también ofrece un alto rendimiento inalámbrico ya que dispone de el estándar ac, HT80 y MIMO. En cuanto al Bluetooth, se corresponde con la versión 4.0 y un perfil de bajo consumo energético. Asimismo, en esta sección encontramos un chip GPS asistido, NFC y soporte para ANT+, de modo que el smartphone será compatible con un buen número de accesorios inalámbricos, especialmente los destinados a actividades físicas. No osbtante, el propio smartphone dispone de sensor de ritmo cardíaco. Dentro del apartado de los sensores, también cabe destacar la presencia de un sensor de huellas dactilares insertado en el botón Home y parte de la pantalla, tal y como sucede en el Galaxy S5.
La autonomía es otro de los puntos en los que Samsung ha trabajado especialmente. A pesar de la capacidad aparentemente reducida de la batería, con 1.860 mAh, el terminal adopta la solución de ahorro energético Ultra Power Saving Mode, software que permite estirar la duración de la batería hasta niveles insospechados.
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